viernes, junio 24, 2011

Paint it black


El veneno fluye por las venas... Corroe, arde, lo emponzoña todo. Encerrada a oscuras, con las ventanas cerradas dejando apenas pasar un haz de luz, una figura tirada en la cama, en tensión. Agarra fuerte las sábanas... Tiene la cara contra el colchón, apretada. Tiembla y solloza desconsoladamente. La oscuridad no podía concebir un mejor ambiente para dar lugar a una escena tan dolorosa. Los pensamientos fluyen a toda velocidad en un entorno donde el tiempo parece haberse detenido... Cada flash que proyecta un pensamiento en nuestra mente acerca la figura a un dolor enloquecedor. Agarra más fuerte el colchón, deshace totalmente la cama, sigue temblando y sollozando. La realidad convertida en una mera espectadora de una escena irreal en la que solamente los pensamientos se mueven. Tiempo y espacio? Sinsentido. Palabras elegidas por arbitrariedad que no tienen ninguna clase de significado en esa situación en la que la figura se siente tan desprotegida. Es esa misma figura a la que no le importan los conceptos tiempo o espacio... Sin embargo, la aguja marca los segundos eternos, impasible. Uno, más uno, más uno, más uno, más uno, más uno, más uno... Tic-tac. A base de sumar granitos de arena el reloj hace una montaña en la que, sin darnos cuenta, ha sumado ya media hora. La realidad vuelve un poco al cuerpo entumecido por el llanto. Los ojos, enrojecidos, llorosos, distorsionados, distinguen con poca claridad lo que observan, de modo borroso. La mente, exhausta, ha exprimido hasta la última gota de locura. El tiempo sigue fluyendo, y la figura ya no tiembla. La estancia parece tener algo más de luz. La agonía empieza a ver su fin, sentenciada por un momento de dolorosa racionalidad que nos obliga a pensar con claridad. El aire, viciado, acumulado en el ambiente, agobia. El cuerpo desconocido empieza a moverse, lentamente, indiferentemente... Solamente desea salir de la estancia. La puerta se abre, la luz entra. Indiferente, se acerca hasta la cocina y bebe un vaso de agua. Se lava la cara y mira su reflejo en la ventana. Una cara exhausta, de ojos cansados y sin ninguna clase de luz propia... Dolido por la visión, permanece estático ente el reflejo con cara inexpresiva. Poco a poco, vuelve a la habitación, abre la ventana, y se tumba en la cama un momento. Empieza a verlo todo más claro. Los pensamientos ya se mueven a su velocidad normal, cosa que no causa el mismo dolor. Las proyecciones se antojan fantasmales, ya no son tan reales. Se sienta en el escritorio y enciende la luz de mesita. A través de la ventana se ve el atardecer, la puesta del sol, con nubes teñidas de rojo en el cielo. Buscando el alivio, el individuo, la figura, coge su pluma, buscando la determinación. Se decide, con la pluma en la mano: establece un pacto con el objeto. Un pacto que actúe como antídoto a su dolor. La pluma será el enlace al dolor de su alma. Levantando el brazo al aire, sosteniendo la pluma como un cuchillo, haciendo una mueca de enfado doloroso, deja caer el brazo sobre un poco más abajo de su muñeca derecha. La pluma se clava, la sangre empieza a brotar. El objeto empieza a llenar el depósito de tinta, gracias a la maniobra. El pacto se sella: A cambio de un poco de dolor extra a modo de sangre, la pluma purgará el veneno que corroe al individuo, gota a gota. Con el brazo sangrante y sin importarle, empieza a escribir cada uno de los dolorosos pensamientos que vertieron el dolor sobre su cuerpo y su mente. El tiempo fluye, el brazo sangra, la mano escribe, el dolor se va... Que gran pacto, curar el veneno a costa de un bien tan preciado. Ya no hay dolor, tan solo líneas escritas en tinta oscura. Ni un ápice de dolor... La realidad ha invadido al individuo, y le sabe bien, le sabe muy bien. El aire lo acaricia,y trae el olor del atardecer para él. Con tranquilidad, deja la pluma en su sitio de nuevo, sabiendo que pasará mucho tiempo hasta que tenga que volver a sellar el pacto, hasta que las gotas de veneno lo inunden de nuevo... Y con esa página, completa una libreta escrita en la misma tinta negra, que expresa una oscuridad, un dolor, una agonía, ese entumecimiento y desconsuelo indescifrables, inexplicables, residente en cada uno de los individuos igual a él que había en esa tierra de entes arbitrarios y confusos, y que no era 100% comprensible hasta que se experienciaba, e incluso después de haberlo experienciado escapaba a la comprensión total. Una mirada tranquilizadora, observando desde una distancia prudente, una cara con mueca de preocupación sincera, una mano serena sobre la espalda... Un mensaje relajador... ''No estás solo''.

martes, junio 07, 2011

Play


Pausa. Un tiempo de paréntesis. Un momento de soledad. Un instante de silencio después de una pelea. Una fracción de tiempo muerto. Un estar a solas, con los pies sobre la tierra, y con la cabeza en un mundo que no tiene nada que ver con el que vives, con el mundo en el que te hallas de cuerpo presente. Volar, alejarte, y sentirlo todo lejos, como estar en una cámara insonorizada en medio de una multitud que chilla estridentemente y te desgarra. Oír ese rumor, ese zumbido, como el de un insecto que bate las alas, ese susurro del viento enfurecido corriendo a través de las hojas de los árboles. Ver como todo se mueve a una velocidad vertiginosa y tú, el centro de todo. El engranaje que no funciona, que no gira, el inmóvil, el imperturbable, el observador, en estado de shock aparente. Miras pero no ves, escuchas pero no oyes, hueles pero no percibes, tocas pero no sientes. Miras esa línea perdida que separa el cielo y la tierra. La miras con intensidad. Tu mente entra en un estado de vacío donde nada existe, donde nada tiene sentido, donde todo es de una profundidad increíble en comparación del mundo real. Donde la belleza roza lo irreal, la belleza de un TODO detenido en torno a ti. Te alejas más, ya no hay susurros, no hay zumbidos, apenas ecos que retumban. Los ojos pierden el color. Las pupilas se dilatan. Te fundes con el horizonte. Nada. Nada de nada. El tiempo no fluye, el aire no corre, la vida no existe, tan solo tú y tus ojos, que observan el horizonte. Fuera de tí, flotando... Los pensamientos ya no se mueven en la cabeza... Como parar una película. No piensas, ergo no existes. Dejas de ser la substancia pensante, afligida por cualquier cosa: Exámenes, futuro, trabajo, dinero, pareja, sentimientos, quehaceres, recados... Minucias cotidianas que te turban. Como no aspirar a nada, como no tener nada que perder... Notas un ligero golpe en la espalda. No le haces caso, tus ojos siguen centrados en el horizonte. Otro golpe. El mar sereno e inmóvil de tu cabeza emite unas ligeras ondas. El cielo recupera un poco su color, tus pupilas están algo menos dilatadas. Otra palmada. Te han dado un electroshock. Has revivido. Oyes voces, muchas voces a tu alrededor, un barullo ensordecedor: Coches, motos, autobuses... Y percibes una presencia borrosa a tu lado que te habla, se dirige a tí.

- Eh...!!

- .... Eh...?

- En qué piensas tío? En qué planeta estás? Jajaja

- ...

- El autobús ya ha llegado, vamos que lo perdemos, hoy tenemos examen final, recuerdas? Como nos lo perdamos tendremos que ir a sufi.

- ...

- Tío, estás empanado... Va hombre, que me voy sin tí.

- Sí, vamos...




Y.... Play!


El autobús deja la parada. Todo vuelve a moverse. Fin de la pausa.
Bienvenido a la república independiente de tu rutina. Ojalá fuera una película: Pondríamos pausa y ya la seguiríamos viendo cuando nos apeteciera.







''Hello, hello, hello... Is there anybody out there? Just nod if you can hear me...
Is there anyone home?
Come on, come on, down... I heard you're feeling down
Well I can ease your pain, get you on your feet again
Relax, relax, relax... I need some information first
Just the basic facts, can you show me where it hurts?
There is no pain, you are receding... A distant ship's smoke on the horizon
You are only coming through in waves...
My lips move, but I can't hear what you're saying...
When I was a child, I had a fever... My hands felt just like two balloons...
Now I've got that feeling once again, I can't explain you would not understand
This is not how I am...
I have become comfortably numb.
Okay, okay, okay... Just a little pin prick, there will be no more
Aaaaaaaahhh!
You may feel a little sick.
Can you stand up, stand up, stand up? I do believe it's working good
The will keep you going for the show, come on it's time to go
There is no pain, you are receding... A distant ship's smoke on the horizon
You are only coming through in waves...
My lips move, but I can't hear what you're saying...
When I was a child I caught a fleeting glimpse out of the corner of my eye
I turned to look but it was gone, I cannot put my finger on it now
The child has grown, the dream is gone...
I have become comfortably numb...''